“Es mas bueno que el pan”; creo que es el mejor elogio que alguien puede recibir,
¿Cómo resistirse al buen aroma con el que nos tienta cuando sale del horno y nos atrae como imán para hacernos caer en tentación? Y son tantas y tan buenas esas tentaciones que encontramos ahora en Bogotá.
El PAN CON TOMATE es para los catalanes, algo así como el arroz blanco para los bogotanos: un estupendo recurso de cocina que aquí se nos empezó a ofrecer en algunos restaurantes hace un tiempo, que encanta a todos y es muy fácil de preparar.
Partimos por la mitad un tomate bien maduro y lo untamos a una buena rebanada de pan francés: es mejor si está tostada. Rocíelo con aceite de oliva y agregue sal. Cómalo así y disfrútelo, pero será delicioso si le pone encima una tortilla a la francesa o jamón, o sardinas. Delicioso para una cena fácil y agradable.